Pregúntele a Yesenia: Enseñando a los niños a tratar con la ansiedad
- Yesenia Gomez-Carrillo
- Jul 29
- 4 min read
El ritmo de la vida es rápido. Entre los plazos de entrega en el trabajo, llevar a los niños a la escuela, prepararles los almuerzos, y la campanita constante de las notificaciones en la computadora, a veces me es fácil sentir que apenas puedo con todo. Cuando era niña, recuerdo estar despierta en la cama repasando el día en mi mente, preguntándome si algo se me había pasado por alto o si había dicho algo mal. El miedo de cometer un error tenía una tendencia de superar todo lo demás. Ahora, como adulta, he aprendido a manejarlo, pero todavía me encuentro cayendo en esa trampa de ansiedad, como muchos de nosotros lo hacemos. ¿Y cómo no vamos a hacerlo, con el ritmo que se mueve la vida? Cuando esto me sucede, es una clara señal de que mi estrés y ansiedad me han abrumado. Es el momento en que debo reiniciar.
Esta columna mensual brinda consejos para cualquier persona que esté criando hijos, basados en el programa de crianza positiva mundialmente reconocido Triple P, disponible para familias en el condado de Santa Cruz. Si tiene preguntas para una columna futura, envíeme un correo electrónico a triplep@first5scc.org.
Estimada Yesenia,
Mi hija de 11 años es una niña amable y responsable que se esfuerza mucho en la escuela y rara vez tiene problemas de conducta importantes. Pero últimamente, me he preocupado por lo ansiosa que está. Se preocupa por todo, por olvidar la tarea, por llegar tarde, por decepcionar a alguien o por hacer algo mal. A menudo se molesta tanto que no puede pensar con claridad. Le digo que todo estará bien, pero eso parece molestarla más. Me preocupa que esto empeore a medida que crezca y se enfrente a más presión. ¿Qué debo hacer?
- Valerie
Estimada Valerie,
Va por buen camino si se toma en serio las emociones de su hija. La ansiedad es una reacción natural a cualquier cosa que el cerebro vea como una "amenaza", incluyendo el estrés en el hogar, la escuela, con los amigos o en la comunidad. Las señales de ansiedad pueden incluir latidos cardíacos y respiración más rápidos, palmas sudorosas, músculos tensos, mareos o malestar estomacal. Estas reacciones físicas pueden hacer que estemos más alertos y preparados para dar lo mejor de nosotros mismos en situaciones como exámenes o deportes.
Sin embargo, también pueden ser aterradores para algunos niños, especialmente si experimentan ansiedad frecuente o intensa. Puede llevar a los niños a creer que algo está mal con ellos o que algo malo sucederá. Si no se trata con estos pensamientos y sentimientos, pueden volverse abrumadores e interferir con la vida diaria. Estos son algunos consejos para ayudar a su familia:
Reconozca y empatice con los sentimientos de su hija. Cuando los niños se molestan, sus "cerebros emocionales" toman el control, lo que les dificulta ver la situación y las opciones con claridad. Muchos padres tratan de tranquilizar a sus hijos diciéndoles que todo va a estar bien, resolver el problema o decirles que la situación no es realmente un gran problema. Aunque los padres pueden tener razón, es más probable que los niños crean estas palabras una vez que se ha reconocido que sus temores son reales para ellos. Una simple afirmación como "Veo que estás realmente preocupada" o "Ya me he sentido así antes" puede tener un efecto calmante.
Haga preguntas y escuche. Trate de averiguar si sucedió algo recientemente que la hizo sentir ansiosa o nerviosa. Luego haga algunas preguntas para animarla a expresar sus pensamientos y sentimientos. Escuche y siga reconociendo sus sentimientos, incluso si no entiende o no está de acuerdo con la forma en que ella ve la situación.
Guíe a su hija por los pasos de resolver problemas. Ayúdela a definir el problema o la preocupación, luego haga una lluvia de ideas sobre posibles formas de manejarlo. Anímela a proponer ideas primero antes de ofrecer sugerencias. Hable sobre los pros y los contras de cada idea, luego ayúdela a decidir cuál probar. Pídale que practique lo que dirá o hará para desarrollar su confianza en su capacidad para manejar la situación. Después de que pruebe su solución, hable sobre cómo funcionó y qué haría la próxima vez que suceda algo similar. Con el tiempo, este proceso ayudará a su hija a aprender formas de manejar el estrés y la ansiedad antes de que se vuelvan abrumadores.
Mantenga la calma y la paciencia. Ayudar a los niños a tratar con la ansiedad puede aumentar el estrés de la familia. Use estrategias de afrontamiento usted misma, como respirar profundamente, decir afirmaciones positivas o tomar un descanso. Esto le ayudará a mantener la calma y la paciencia, al mismo tiempo que modela estrategias de afrontamiento saludables.
REFLEXIONES FINALES: El estrés y la ansiedad son partes inevitables de la vida diaria, pero no tienen por qué apoderarse de nuestras vidas. Aprender a tratar con la ansiedad en la niñez es una habilidad importante para la vida que se puede desarrollar con el tiempo y la práctica.
Yesenia Gómez-Carrillo es madre de una niña de 3 años y Gerente del Programa Triple P para Primeros 5 Santa Cruz County. Científicamente probado, Triple P está disponible localmente por Primeros 5, la Agencia de Servicios de Salud del Condado de Santa Cruz y el Departamento de Servicios Humanos del Condado de Santa Cruz. Para encontrar una clase o practicante para padres de Triple P, visite http://triplep.first5scc.org,http://www.facebook.com/triplepscc o comuníquese con Primeros 5 Santa Cruz County al 465-2217 o triplep@first5scc.org.